Luis Sanz Menéndez, Instituto de Políticas y Bienes Públicos, CSIC, Madrid, España; Tiago Santos Pereira, Centro de Estudios Sociales (CES) de la Universidad de Coímbra, Portugal;
La Unión Europea se fijó el objetivo de que el sector empresarial invierta en I+D el 2 % del PIB. ¿Cómo está siendo la convergencia de España y Portugal hacia esta meta?
¿Qué opina la sociedad acerca de los posibles impactos de la ciencia y la tecnología? Establecer mecanismos de participación ciudadana es necesario para generar confianza y detectar puntos de mejora.
En el 2019, el porcentaje de presupuesto público total destinado a I+D fue de un 1,24 % en España y un 0,82 % en Portugal, ambos por debajo de la media de la EU-27.
En España y Portugal, la proporción de empresas innovadoras, así como el grado en el que estas colaboran con otras empresas y organizaciones, es inferior a la media de la EU-27.
Mientras que la participación de mujeres doctoras en Portugal se sitúa por encima de la media de la EU‑27 en todas las ramas de conocimiento consideradas, en España, la participación de mujeres doctoras se sitúa por debajo de la media europea en las ramas de arte, humanidades y ciencias sociales.
¿Portugal atrae más talento que España? En el 2020, la atracción de talento internacional se situó por debajo de la media europea (18,7 %) en el caso de España (17,2 %) y por encima de la media (29,1 %) en el de Portugal.
Portugal, junto con Dinamarca, es una excepción en la EU-27 y tiene un porcentaje de mujeres científicas e ingenieras que supera ligeramente la media europea.
A pesar del crecimiento en los últimos 10 años, la posición relativa de España y Portugal en cuanto a solicitudes de patentes se encuentra muy alejada de la de los países líderes en innovación.
El modelo de apoyo gubernamental a la I+D empresarial difiere entre España y Portugal, con un predominio de la ayuda directa en el caso de España y de la indirecta en el de Portugal.
España y Portugal se sitúan por encima de la media europea en porcentaje de investigadoras en todos los sectores considerados, si bien la participación más baja corresponde al sector empresarial y la más alta, al gubernamental.